La Cadete de 6to año del Liceo Aeronáutico Militar, María Guadalupe Chaín, realizó un extraordinario viaje a la gran ciudad brasilera de Río de Janeiro, donde experimentó la convivencia con millones de jóvenes de todos los países del mundo que asistieron a la Jornada para vivir el clima de fe de forma mundial.
La alumna participó de todos los eventos oficiales previstos en el programa: La Apertura de la Jornada Mundial de la Juventud con el Obispo Orani el martes 23 de julio, la Acogida al Papa el jueves 25, el Vía Crusis el viernes 26, la Peregrinación y la Vigilia con Adoración Eucarística en sábado 27.
Chaín nos cuenta lo que sintió aquel día: “Fue un momento de intensa meditación, oración y paz el que se vivió allí, con la tranquilidad de millones de personas compartiendo el silencio y el Amor de Dios” y por último la Misa de envío el domingo 28 donde se recalcó el lema de la Jornada: “Id y haced discípulos a todas las naciones”, todos estos eventos acontecidos en la popular playa de Copacabana.
También asistió a las catequesis distribuidas por idiomas en el horario de mañana los días miércoles 24 y viernes 26 (esta última con la presencia del Obispo de San Juan Alfonso Rogelio Delgado encargado de dar la catequesis). La alumna pudo estar presente en el exterior de la catedral de la ciudad carioca el jueves 25 cuando ocurrió el encuentro del Papa Francisco con los argentinos, aquí nos cuenta lo que sintió en ese momento: “Pudimos verlo y escuchar sus palabras desde afuera, eso nos produjo una sensación inmensa de alegría y gratitud al dedicar su valioso tiempo a todos nosotros, al pueblo argentino”.
En los momentos libres la Jornada ofrecía la Feria Vocacional (exposición de las diversas comunidades religiosas) y el Festival de la Juventud (diversos entretenimientos, musicales, teatrales, cinematográficos, etc.). En este importante acontecimiento, María Guadalupe consiguió encontrarse con un egresado del instituto y presenció el entretenimiento musical de cantantes argentinos como el del profesor del Liceo Pablo Martínez, Athenas Venica (cantante católica), Soledad Pastorutti y Axel Fernando en el cierre de la JMJ.
A continuación nos brinda su testimonio:
“Tuve la oportunidad de realizar UN GRAN VIAJE DE FE”
El pasado 23 de Julio abordé un avión junto con un grupo de amigos y conocidos de la Parroquia Sagrada Familia del barrio porteño de Saavedra rumbo a la gran ciudad de Río de Janeiro, en la cual se efectuaría el encuentro mundial de jóvenes católicos llamado JMJ.
Luego del viaje transcurrido y el traslado hacia la Parroquia carioca asignada al grupo, Nuestra señora del Perpetuo Socorro, partimos hasta la playa de Copacabana donde se realizó la misa de apertura con el obispo de Río de Janeiro Monseñor Orani, en el escenario instalado en la cabecera de la playa.
Después de un día tan movido y cansador, nos fuimos a descansar para el día siguiente participar de la catequesis con los obispos (distribuida por idiomas) por la mañana; por la tarde la Jornada ofrecía la Feria Vocacional (exposición de las diversas comunidades religiosas) y el Festival de la Juventud (diversos entretenimientos, musicales, teatrales, cinematográficos, etc.).
El jueves por la mañana concurrimos al encuentro del Papa Francisco con los argentinos en la Catedral de la ciudad, donde pudimos verlo y escuchar sus palabras desde el exterior, lo cual produjo una sensación inmensa de alegría y gratitud al dedicar su valioso tiempo al pueblo argentino. En el horario de tarde fue la acogida al Papa en la playa de Copacabana donde celebró la palabra desde el escenario central.
El cuarto día de Jornada comenzamos nuevamente con la catequesis por la mañana, siendo ésta en especial por la presencia del obispo de la provincia de San Juan , quién se encargó de dar la catequesis del viernes. Por la noche se realizó en la playa de Copacabana el Via-Crusis con la presencia del Papa Francisco en el escenario central.
Día sábado aconteció la peregrinación multitudinaria hacía la playa de Copacabana por parte de todos los jóvenes peregrinos e incluso de muchos turistas, fue una caminata de 9Km para llegar al lugar y poder encontrar un espacio donde instalarse para poder presenciar el evento de la Vigilia con Adoración Eucarística presidida por el Sumo Pontífice. Fue un momento de intensa meditación, oración y paz el que se vivió allí, con la tranquilidad de millones de personas compartiendo el silencio y el Amor de Dios.
Aquella noche dormimos en la playa y al día siguiente los jóvenes de muchos países del mundo recibimos a Su Santidad con una coreografía llamada Flash Mob de la JMJ con la canción “Francisco” y luego se celebró la misa de envío con especial atención al lema de la Jornada: “Id y haced discípulos a todas las naciones.”
“Tuve la oportunidad de realizar este gran viaje de Fe junto a un grupo de personas muy apreciadas que me brindaron todo su apoyo, sobre todo mi coordinadora Vanina Cortese, la azafata de Aerolineas Argentinas, que cuando se enteró que llevaba el estandarte de la patrona de la aviación, la Virgen de Loreto, sintió una gran emoción. Lo que se vivió en ese clima de juventud, alegría emoción, amor, fraternidad, esperanza y humildad era permanente y aún permanece; porque el Amor de Dios hace posible todas la cosas. Me encontré con chicos del lugar donde fui a misionar en verano y con una amiga de la parroquia vecina de la vicaria. Fue la gracia de Dios que quiso que yo esté ahí por una razón y es la de contarles esto a ustedes.”
